El origen del títere lo encontramos en la Antigua Grecia, lugar donde los griegos aplicaron el movimiento de muñecos a partir del uso de hilos colgantes. Según la historia, el propósito del títere era entretener a las personas y, muchas veces, divertir a los más pequeños, concepto que aún persiste. Sin embargo, se afirma que los títeres pertenecen a todas las culturas del mundo, sencillamente porque el ser humano siempre ha buscado entretenerse con algo de modo creativo. Por ello, puede pensarse que su origen está en la sombra que reflejaba el cuerpo humano ante las hogueras. Esta sombra se reflejaba en las paredes de las cuevas y era en ellas donde se plasmaban los movimientos que los individuos hacían. A partir de la imagen que se proyectaba, y con interpretación de los movimientos, es que la gente de aquellos años ideó un muñeco capaz de moverse como la sombra pero siendo manipulado por hilos. El primer títere que existió se cree que fue plano. Es decir, solo una figura dibujada en la piel de los animales que los antepasados cazaban.El más antiguo que se conoce se encontró en la India, aunque también se descubrieron muchos en Indonesia, Birmania, Turquía y África. En estos últimos lugares, el títere comenzó a tener cuerpo completo.